
Solusi Payudara Indah
Hace 10 años
problemas que amenaza con asfixiar el american way of life. Un sondeo de The New York Times y la cadena de televisión CBS muestra que 79 por ciento de los ciudadanos son optimistas respecto a lo que será su desempeño en los próximos 4 años. No sólo eso: están dispuestos a tener paciencia hasta que logre poner a flote la averiada nave. No son pequeños los retos: dos guerras, crisis económica, finanzas públicas quebradas, la lista es larga. Inesperadamente México se trepó a la agenda de prioridades de Obama, pero no en la forma que hubiéramos deseado: la narcoviolencia que se cuela desde la frontera con México. Cito un cable de ayer de la agencia Associated Press: Título: “¿México se colapsa?” Y dice en su primer párrafo: “Secuestros indiscriminados. Decapitaciones casi diarias. Bandas que corrompen y asesinan a agentes del gobierno. Esto no es Irán o Pakistán. Es México, país del cual el gobierno de Estados Unidos y un creciente número de expertos dicen que se está convirtiendo en uno de los mayores riesgos de seguridad del mundo”. Habría que precisar que si algo se colapsa no es México, quizá sólo el gobierno calderonista. ¿Qué tiene Obama en mente? Por lo pronto encomendó la secretaría de Seguridad Interior a una mujer: Janet Napolitano, ex gobernadora de Arizona. Es dura, años atrás ganó la batalla al cáncer de seno. Calderón está desaprovechando un tiempo no renovable para hacer cambios profundos, pero, como decían los antiguos: “los dioses ciegan a quienes quieren perder”.
Casa Blanca y el Pentágono, de tal manera que bajo esa lupa hegemónica han de entenderse las injerencias “justificadas” (desde el punto de vista del imperio en declive) en el patio trasero alborotado y contaminante. Catalogado por el comando conjunto de las fuerzas armadas estadunidenses como uno de los “estados débiles y fallidos”, junto a Pakistán, ambos en riesgo de colapso, México también ha estado en las consideraciones de la CIA como uno de los principales retos para la política exterior estadunidense, ni más ni menos que junto a Irán.
Considerado el peor presidente de Estados Unidos de los últimos tiempos, George W. Bush dejará este martes la Casa Blanca con una estela de engaños, abusos y errores que han causado graves consecuencias para su país y el mundo. Su asunción ocurrió enmedio de acusaciones de fraude electoral, y los atentados del 11 de septiembre de 2001 le dieron el pretexto para desatar las guerras contra Irak y Afganistán. Los expertos subrayan que creó una ‘‘presidencia imperial’’, con poderes extraordinarios, para realizar operaciones militares donde sea, aplicar torturas y espionaje sin orden judicial. No hubo rama que no fuera afectada por su ideología fundamentalista. Con él se vinieron abajo las ilusiones sobre el libre mercado, ya que deja en herencia la peor crisis financiera y económica desde la gran depresión. También desdeñó acciones en favor del medio ambiente, la salud y la educación Collage de La Jornada